Más de 15 estudiantes del curso introductorio de HTML y CSS, ofrecido por profesores del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) y la Facultad de Derecho Uniandes, recibieron su certificado este martes 4 de junio.
Se trata de un grupo de pospenados que, desde el mes de febrero, inició formación como parte de la alianza entre Uniandes y MIT y del trabajo conjunto entre la Clínica Jurídica Grupo de Prisiones, profesores del área de Derecho Penal de la Facultad de Derecho de Los Andes, y del equipo de The Educational Justice Institute (TEJI) del MIT, con el propósito de mejorar, a través de la educación, la calidad de vida de personas que están o han estado en prisión.
Según Valentina Díaz Moya, coordinadora del Grupo de Prisiones Uniandes, “este curso con MIT tiene marcado impacto social en el proceso de resocialización de los beneficiarios, puesto que les permite desarrollar habilidades competitivas que son ampliamente requeridas en el mundo laboral actual y que pueden significar una alternativa de ingresos formal, apalancar sus emprendimientos y compartir el conocimiento adquirido con sus comunidades”.
Por eso, tras cumplir las horas previstas para el ciclo de formación, los estudiantes recibieron su certificado de participación, con el que se espera puedan acceder a oportunidades diferentes en el mercado laboral y continuar con su proceso educativo.
La directora del Consultorio Jurídico de la Facultad de Derecho Uniandes, Ángela Yepes, resaltó los resultados que representan estos grados para la labor de quienes acompañan a las comunidades en los territorios, específicamente, para este caso, a la población carcelaria. “Esta iniciativa, responde a una serie de acciones que se realizan desde el Consultorio Jurídico de la Facultad de Derecho Uniandes con el fin de transformar la vida de las personas, apoyarlas en su formación académica y darles nuevas oportunidades por medio de la herramienta más poderosa con la que contamos en la Universidad: la educación”.
Así mismo durante la ceremonia de entrega de certificados resaltó que esta iniciativa conjunta ha permitido, además, ofrecer alternativas innovadoras frente a las que tradicionalmente se ofrecen para esta población, lo que implica más posibilidades de desarrollo.
Frente a este punto, el profesor de derecho penal, Fernando Tamayo, quien acompañó el curso hizo énfasis en que “la formación a la que tradicionalmente han tenido acceso las personas privadas de la libertad en Colombia tiene que ver con actividades artesanales, culturales y de oficios. Si bien estas contribuyen en la ocupación y la reducción de penas durante el tiempo en prisión, sus posibilidades reales en el mundo del trabajo son limitadas. Por eso con queremos ir más allá y abrir puertas para oportunidades que les permitan opciones de reinserción laboral”.
Se espera que esta iniciativa se replique con el propósito de ofrecer acceso a la formación a más personas pospenadas y que se consolide como una iniciativa innovadora que abra posibilidades a la población bajo esta condición en Colombia.